martes, 10 de noviembre de 2009

NO HAY UN INSTANTE...


En los momentos sombríos, Yo seré tu luz. En los momentos de tristeza, seré tu alegría. En los momentos de lucha, seré tu liberación. En los momentos de debilidad, te infundiré fuerzas. En los momentos de incertidumbre, seré tu explicación. Y lo que es más: soy amor para ti. Jamás te negaré Mi amor. No te desanimes, pues; no te descorazones. No mires atrás. No abrigues remordimiento por errores o pecados del ayer. Lo pasado, pasado está. Desde el primer momento en que imploraste Mi misericordia, desde el preciso instante en que clamaste a Mí, te concedí Mi perdón. No hay, pues, motivo para que sigas preocupándote, temiendo y llevando la carga tú mismo. No temas nunca el futuro ni te atormentes por el pasado. Alza los ojos y contempla Mi amoroso rostro. Ven a Mí, y encontrarás perfecta fortaleza, perfecto amor, perfecto perdón y perfecto consuelo desde ahora hasta el día en que vuelva para llevarte conmigo. Jesús

No hay comentarios:

Publicar un comentario